martes, 31 de mayo de 2016

Starbucks o la falsa ilusión del café en vaso


café en vaso (lalegal.cl)


Desde hace algún tiempo, el tomar café se ha convertido en algo masivo, lo cual de por sí no tiene nada de malo. Pero esta democratización del café ha traído sus efectos indeseados: la cartelización de las cafeterías en pocas manos, desapareciendo los café de barrio y tradicionales, siendo el mejor ejemplo de lo anterior Starbucks. La cadena estadounidense ha masificado un estilo de venta de café, el de insípidas cafeterías sin alma, todas iguales, con empleados que ganan miserias y que ni siquiera pueden soñar con propinas (pese a la existencia del tarrito de propinas), ha popularizado el café en vaso, el cual es un signo de estos tiempos: vivir apurado y tomarlo para seguir corriendo por la vida. Quien escribe siempre ha pensado que el tomar café debe de ser un placer, es decir, hay que tomarse su tiempo para disfrutarlo, conversarlo o simplemente pensarlo, no de correr y vivir con el vaso para arriba y abajo.

Más allá que el café más económico (el llamado café del día) de Starbucks sea muchas veces intomable (pese a costar promedio en gran parte de América Latina cerca de 2 dólares), es sin duda, el símbolo de una era que hace que todo sea desechable...el hecho de que tanto para llevar como para tomar en las cafeterías de cadena sea servido mayoritariamente en estos vasos de cartón sin alma (aunque cuando se piden tipos especiales de cafpe, se le coloca el nombre de la persona...todo con darle personalidad a algo mustio) es el reflejo del anticafé, en otras palabras, del sentido de tomar un buen café...

                                ¿Y que piensas del café en vaso o del café del día?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario